A más de una década de la construcción del último motor de seis cilindros en línea, Mercedes-Benz anunció que ha puesto en marcha el desarrollo para la creación de un propulsor de esta naturaleza.
Este motor irrumpe en la familia de mecánicas de Mercedes-Benz con el estandarte de ser capaz de producir 430 caballos de fuerza y estar preparado para ser instalado en el nuevo CLS, bajo su configuración AMG.
No obstante, este primer uso del motor estará reservado exclusivamente para la versión europea de dicho modelo, pues según los planes de la compañía, la Clase S AMG que se contempla para el mercado norteamericano será un V6 que a la fecha produce 333 caballos de fuerza y 354 libras-pie de torque.
Este nuevo motor se identificará como M256 y servirá para crear una nueva gama AMG, denominada AMG 53.
Integra lo más avanzado de tecnología mecánica dentro la compañía pues incorpora dos turbocargadores destacados por su avanzado desarrollo.
El primero de ellos opera gracias a la energía del escape, mientras que el otro funciona mediante el poder eléctrico que genera un sistema de 48 voltios.
La proyección de la gama AMG53 contempla el reemplazo de los actuales motores que equipan a la nomenclatura AMG63, cuya mecánica es la de propulsores V8 de 4.0 litros