Como bien sabemos, la presencia de vehículos electrificados en las calles de todo el mundo no para de aumentar. Lo que parece ser un camino de ida en la industria automotriz no solo genera cambios en los propios fabricantes, sino también en los servicios que directa o indirectamente se vinculan con los modelos a batería.
En este caso reseñamos lo acontecido con los bomberos de Bélgica, que ante el incendio de una unidad impulsada por un sistema motriz híbrido decidieron sumergirlo por completo en un contenedor con agua. Sí, así como leíste.
¿Por qué tomaron una medida tan drástica?
Para encontrar la causa a tamaña decisión hay que considerar el origen del incendio: la batería. Aparentemente, el elemento tomó una temperatura superior a la soportada, lo que derivó en la aparición de humo, que luego se convirtió en fuego.
Ante el inconveniente los bomberos apagaron las llamas, pero la cosa no terminó allí: debido a los procesos químicos que se llevan a cabo dentro de la batería, el fuego puede volver a aparecer horas o hasta días después. Para evitarlo, no basta con enfriar el elemento rápidamente y listo, sino que se trata de un proceso que requiere un largo periodo de tiempo.
¿La solución? Un contenedor lleno de agua. Si bien desde el cuerpo de bomberos no especificaron el tiempo exacto, sí mencionaron que el vehículo afectado permaneció sumergido durante un buen rato.
¿Era necesario arruinar todo el auto?
El hecho de que el vehículo permaneciera durante mucho tiempo bajo el agua lo hizo prácticamente inutilizable. De todas maneras, los propios bomberos aseguraron que el automotor quedó destruido por el incendio mismo.
Tras la acción, el vehículo se trasladó a un depósito para su desmantelamiento. Por su parte, el agua no se evacuó así simplemente, puesto que se contaminó con los agentes químicos; por ello se filtró y al final se desechó.
La medida realizada por los bomberos belgas se replica en otros países del Viejo Continente. Por ejemplo, el Automóvil Club de Alemania (ADAC) realiza una acción similar luego de llevar a cabo las pruebas NCAP en su sede. Claro, los autos electrificados que participan terminan con daños que requieren tomar todas las medidas de seguridad pertinentes para evitar complicaciones posteriores.
