
Habrá pocos que hoy en día pongan en tela de juicio el lugar de la Semana del Automóvil de Monterey como el rey de los eventos de superlujo en la industria, y esta posición ha hecho que año con año veamos reales joyas del motor siendo puestas en subasta dentro de esta celebración al automóvil que se realiza cada año en la costa de California.
Para este año, la casa de subastas RM Sotheby´s pondrá una inmensa cantidad de autos bajo el martillo, pero hay uno que sobre sale de todo este lote, uno de los siete McLaren F1 importados originalmente a Estados Unidos. En este caso hablamos del chasis 062, llevado en 1997 a la Unión Americana por Ameritech, a petición del CEO de Oracle, Larry Ellison, el dueño original.
Este F1 tiene poco más de 10,000 kilómetros en el odómetro y es puesto a la venta por su tercer dueño. Como dato curioso, este vehículo ha estado sus 18 años de vida en la zona de la Bahía (específicamente San Francisco).
Con el paso de los años este auto recibió algunas mejoras, todas ellas hechas por la división McLaren Special Operations, como cambios en el sistema del aire acondicionado, un tanque de combustible de aluminio, escape y mejoras en los radiadores, mientras que el año pasado estuvo en McLaren Filadelfia para una revisión y servicio completo, que incluyó ajustes de la transmisión, chequeo de los protectores de calor (de oro) de la zona del motor y neumáticos nuevos (montados sobre los rines originales de magnesio), entre otros, todo ello realizado por personal certificado de McLaren y documentado para garantizar la originalidad del vehículo.
RM Sotheby´s resalta la originalidad del modelo, no sólo por haber estado siempre en la misma zona donde se entregó de nuevo, sino porque no sufrió modificaciones mayores por parte de sus propietarios, la pintura es la original, en tono Magnesium Silver, el interior también está como salió en 1997 de la fábrica, además de incluir todos los elementos con los que se entregaba, como manuales, llanta de refacción, herramentales y un kit de detallado.
La casa de subastas espera obtener más de 23,000,000 de dólares por este auto, que será puesto bajo el martillo en el evento que realizará el 15 y 16 de agosto en la Monterey Car Week.
A mediados de los años 80, los superdeportivos estaban teniendo un auge importante, trayéndonos algunos de los modelos más aclamados y deseados por los amantes del mundo motor. El McLaren F1 es uno de ellos.
La historia cuenta que su concepción fue fortuita, pues Gordon Murray hizo un boceto del auto mientras mataba el tiempo en un aeropuerto, mismo que le mostró después a Ron Dennis, quien lo aprobó de inmediato para que fuera el modelo halo de su recién abierta división de automóviles McLaren Automotive.
Murray gozó prácticamente de un presupuesto ilimitado para crear el mejor deportivo de la historia, y así lo hizo. Como los grandes dominadores de la Fórmula 1 a finales de los 80, el coche no podía tener otro nombre más que F1.
La configuración de la cabina pone al piloto al centro del vehículo, para mejorar la visibilidad y tener un mejor reparto de pesos, con los dos pasajeros colocados a la derecha y la izquierda. Fue el primer vehículo con un monocasco de fibra de carbono, las suspensiones se construían de una pieza sólida de aluminio, los rines eran de magnesio, los cálipers de los frenos tenían una extraña fabricación de bajo peso hecha por Brembo, y no tenía asistencias, ni dirección hidráulica, además, el sistema de audio Kenwood era el más ligero de la industria.
Con todo ello, y otras soluciones, el McLaren F1 pesaba 1,138 kilos, lo que unido al motor V12 6.1 litros (de origen BMW) con 627 caballos de fuerza, creaba una máquina única, con una aceleración de 0 a 100 km/h apenas por arriba de los 3.2 segundos.
El diseño final de la carrocería fue obra de Peter Stevens, uno de los diseñadores automotrices más importantes de esa era.
Este superdeportivo se vendió entre 1992 y 1998, fabricando 106 unidades, 62 de ellas del modelo normal, 5 LM, 2 GT, 2 HDK, 28 GTR y 7 prototipos de distintas variantes.