Cuando se restaura un auto clásico se puede optar por dejar el motor original de manera intacta o bien haciendo una serie de ajustes para alcanzar más poder. Pero para quienes desean un desempeño superior, está la opción de hacer un trasplante imponiendo un bloque más grande sin importar que sea de la misma marca.
Basándose en esta última propuesta, un Mustang ochentero, específicamente, de una versión Fox Body, fue más allá y obtuvo un motor que por su cilindrada, lo convierte en un muscle car de alarido.
Basta decir que el nuevo motor proviene de una pickup para entender que la cantidad de potencia, pero sobre todo de torque, se aleja por mucho de lo que ofrece este muscle car en su originalidad.
Teniendo en cuenta su capacidad, tamaño y modernidad, el creador de este Mustang Fox Body decidió imponer el V8 de 7.3 litros que ocupa la Ford Super Duty. Claro que con las dimensiones de este ocho cilindros con más de 600 hp, se tuvo que hacer una serie de adecuaciones en el cofre para que tuviera cabida.
Además de este cambio de motor, el Mustang recibe una serie de ajustes en la carrocería, tal es el caso del kit aerodinámico, el wide body, los rines y la apariencia de acero inoxidable.
Lo más impresionante de todo este proyecto es que se trata de un trabajo digital. Sí, se trata de un proyecto virtual realizado por el diseñador Abimelec Arellano. Queda claro que por lo imponente que se ve este proyecto, al que bautizó como Ford Mustang "Foxzilla", pronto algún tuner lo llevará a la realidad.